Encuentro de Copleros, paseo Los Colorados
Ese 10 de enero se celebraba en el pueblo un Encuentro de Copleros, musiqueros que venían de las cercanías a reunirse en la plaza de Purmamarca para cantar sus coplas y compartir una velada que se iba a estirar hasta la madrugada.
Encuentro de
Copleros
Andando entre los corrillos se podían escuchar como ensayaban las coplas que luego iban a entonar. Cuecas, carnavalitos, sayas y taquiraris se sucedían entre risas y brindis prematuros.
Después de curiosear un rato cruzamos la RN 52 para volver a subir al Morado, para disfrutar de nuevo de esas vistas del Siete Colores que son impagables.
Subiendo al
Morado
No me canso de contemplar ese paisaje.
Bajamos más tarde al pueblo a picar algo, fue un acierto elegir las cálidas mesas de cardón de El Rincón de Claudia Vitre.
El Rincón de
Claudia Vitre
Como afuera el jolgorio seguía (más bien iba en aumento) nos escapamos por los senderitos que salen del pueblo perdiéndose entre esas vistosas sierras. Primero subimos a El Porito, el cerro adyacente al Siete Colores.
Nos debíamos un paseo por Los Colorados, el sendero que rodea al Cerro de los Siete Colores y permite entender un poco más como es que la naturaleza nos regala esta policromía.
Es como ver el “backstage” o la trastienda del Cerro de los Siete Colores.
Sobreabundan los óxidos de hierro, que le dan ese color característico a la piedra.
A dónde van? Vengan, saluden!
Eso…
Va cayendo el sol en Purmamarca
El lánguido atardecer estival dio paso a las coplas, que iban creciendo en intensidad mientras los copleros, en alegre montón, hacían procesión por las calles del pueblito que palpitaba su noche insomne. Chicha y aloja. Vino y cerveza. Y mucha música.
Tilcara ⇒
⇐ Iruya
ResponderEliminarQué día magnífico! Desde el Encuentro de Copleros, pasando por la maravillosa nueva visión del Cerro de los Siete Colores y culminando en el Paseo de Los Colorados (qué buenas las fotos con las sombras de las siluetas recortadas en la piedra!)...
Qué ganas de estar comiendo alguna delicia norteña en el Rincón de Claudia Vitre, tan acogedor! No poder estar ahí ya mismo!
Enrique