martes, 9 de agosto de 2022

San José de Jáchal

 

En Jáchal el adobe no pasó de moda.

Si bien en la plaza principal y calles aledañas se van imponiendo materiales y recursos de construcción más modernos, adentrándonos unas pocas cuadras el aspecto de la ciudad cambia por completo. Las añosas casas de ladrillos de adobe, altas y frescas, desafían el paso del tiempo y los sacudones que esta tierra entrega de tanto en tanto, como para recordarnos que nada está establecido del todo, que hasta las impertérritas montañas pueden cambiar.

 

Es todo adobe

Pero el adobe persiste, tenaz, demostrando ser uno de los mejores recursos para estos suelos temblorosos e inestables. Y no es un invento argentino: pude constatarlo en un interesante Seminario: “Adobe, Patrimonio Mundial y Arquitectura Contemporánea – Desafíos Globales”, organizado por la Comisión Nacional de Monumentos, de Lugares y de Bienes Históricos. Desde Arabia Saudita hasta California, desde Sudáfrica hasta Japón, desde Australia hasta el NOA, el adobe se utilizó y se sigue utilizando transculturalmente, como material de construcción sencillo y eficaz.

 

Ladrillos de adobe esperando ser utilizados

Por eso, el día de nuestra partida hacia el siguiente destino, después de desayunar y cargar las valijas nos lanzamos a recorrer esta ciudad, que no está rota, ni descuidada o falta de manutención; simplemente es de adobe.

 

La ciudad

 

La ciudad

 

El adobe no se lleva bien con el revoque

 

Siestita

Nos dejamos llevar, perdiéndonos por las calles interiores, pero no íbamos a partir sin despedirnos de la plaza San Martín, centro neurálgico de la ciudad. 

 

Plaza San Martín

 

Plaza San Martín

 

El restaurante 1000 ochocientos, frente a la plaza

Una última pasada por la Parroquia de San José, también frente a la plaza:

 

Parroquia de San José 

 


El Señor de la Agonía

 

 

 

En la Parroquia de San José se conserva esta primorosa talla en madera, que fue traída de la Villa Imperial de Potosí en el año 1783, y se la conoce también como el “Cristo Negro”.

 

 

 

Otro lugar con historia a pasitos de la plaza es Confitería Garcés, que lleva más de 100 años atendiendo a vecinos y turistas.

 

Mesa decorada en Confitería Garcés

 

Confitería Garcés

 

Historia reciente: Los problemas del agua

Hay un episodio que vincula a la ciudad de Jáchal con los problemas que suele causar la megaminería cuando está mal gestionada tanto desde el sector privado como desde el público:

En el año 2015, la rotura de una válvula en la mina Veladero, propiedad de la Barrick Gold, envenenó con material cianurado el agua de al menos cinco ríos de San Juan, entre los que se encontraba el Jáchal.

El que quizás haya sido el mayor desastre ambiental en la historia de la minería argentina a la fecha, se hizo público solo después de filtraciones y conversaciones informales entre trabajadores de la mina y los habitantes del pueblo de Jáchal.

Luego de innumerables pedidos y movilizaciones, la presión de los vecinos propició un estudio técnico sobre el agua de los ríos de la zona, el cual detectó contaminación con metales en dosis de hasta 1400 % por encima de los valores tolerables para el consumo humano.

Como es de suponer, el caso fue invisibilizado por los grandes medios, reinó la impunidad y nadie pagó por el daño causado, ni la empresa ni los funcionarios involucrados. Lamentablemente una historia repetida.

 

Buenaventura Luna

Las leyendas inscritas en el monolito del mirador de la Cuesta de Huaco me invitaron a explorar los otros aspectos de su vida pública, y la curiosidad me llevó a trascender el personaje que nos muestra el seudónimo: hurgando un poco en la vida de Eusebio de Jesús Dojorti (tal su nombre real), debo decir que la dimensión de su obra político-intelectual excede largamente los alcances de estas líneas. Quisiera describirlo con las mismas palabras que él utilizó con respecto a cierta actitud de negación hacia el Martín Fierro: “cuando fracasa la estrategia del olvido, se apela al recurso de considerar tan sólo lo anecdótico, hasta construir un personaje pintoresco”.

 

Vale la pena darse una vuelta por el blog que le dedica su nieto Carlos Semorile, en el cual también alude a su tío materno Juan Pablo Maestre, otro hijo de don Eusebio: <enlace>

 

Lasrutas escénicas - parte 1

Huaco

 

2 comentarios:

  1. excelente la recorrida por Jachal
    ya no es solo turismo, tambien es medio ambiente con la denuncia por la contaminacion de los rios
    sigue siendo Luis mi guía preferido
    Osvaldo

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  2. Otra ciudad de las que me encantan! La magia del adobe! Estoy muy ligado al adobe porque en Santa Fe (New Mexico), donde vivía mi hermano prevalecía totalmente ese material, lo que le confería un aspecto muy atractivo y cálido.

    Qué linda la Parroquia San José, imponente la torre! Y el Cristo Negro, qué valioso, en todo sentido! La plaza, el restaurante, el almacén, la confitería, todo con ese sabor a genuino de nuestras ciudades y pueblos del interior...

    Qué vergüenza lo de la contaminación del agua, increíble!

    Cómo me gustaría desayunar mañana en la confitería Garcés!

    Enrique

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